La catedral de Burgos dará la salida a la primera etapa de la 43ª Vuelta a Burgos que se disputará -sobre cinto etapas el línea- del 3 al 7 de agosto, bajo la organización del Instituto Provincial para el Deporte y Juventud (IDJ) de la Diputación de Burgos.

La Diputación de Burgos vuelve a hacer un guiño a la conmemoración del VIII Centenario de la Catedral de Burgos danto todo el protagonismo en la primera salida de la ronda al templo gótico burgalés, que cumplirá sus 800 primeros años el próximo 20 de julio.

El diseño de esta primera etapa ha buscado el espectáculo para el aficionado con un final muy nervioso y rápido, así como una primera parte completamente llana en la que los rodadores tendrán la oporunidad de imprimir un fuerte ritmo desde el principio. Se contempla un primer paso por el Alto del Castillo (3ª Categoría) a falta de 14 kilómetros para el final, antes de afrontar la segunda y definitiva ascensión que llevará a los corredores hasta la línea de meta, donde también puntuará como un puerto de Tercera Categoría.

Los últimos 19 kilómetros se disputarán sobre un trazado urbano por las calles de la capital burgalesa, por lo que el aficionado tendrá la oportunidad de ver en dos ocasiones a todo el pelotón por las sinuosas calles que configuran la ladera del Castillo, en Burgos capital, por las que se asciende a la línea de meta. Uno de los puntos más calientes de la jornada estará en el último kilómetro, donde los favoritos al triunfo de etapa deberán entrar bien colocados en la subida de San Miguel; una cuesta con desniveles importantes (170 metros al 10,6%) a la que se accede tras un giro a derecha de noventa grados, justo al final de una larga recta como es la calle San Francisco, en la que el pelotón rodará muy rápido.

Tras el protocolario corte de cinta a los pies de la catedral de Burgos, que este año también acogerá la salida oficial de La Vuelta, los corredores harán unos primeros kilómetros de neutralizada por las calles de la capital antes de salir por la zona sur en dirección Villagonzalo Pedernales. A partir de ahí, la carrera transitará por Arcos de la Llana, Villanueva-Matamala, Pedrosa de Muñó, Presencio, Ciadoncha y Santa María del Campo, sítuada en el kilómetro 31 de carrera. A partir de este punto, Pampliega, Villaquirán de los Infantes, Castrojeriz, Castrillo Mota de Judíos, Arenillas de Río Pisuerga y Melgar de Fernamental, en el 74.

Desde Melgar la carrera tomará dirección Burgos y el paso de los ciclistas se hará por localidades como Padilla de Abajo, Villasandino, Castrillo de Murcia, Yudego, Villanueva de Argaño, Las Quintanillas, Santa María Tajadura, Pedrosa del Río Urbel, Mansilla de Burgos, Arroyal, Quintanadueñas y Villarmero para hacer entrada a Burgos capital. Ya en Burgos, los ciclistas afrontarán la primera ascensión al Alto del Castillo, puntuable para la General de la Montaña, antes de completar los últimos 14 kilómetros que finalizarán con la segunda y definitiva subida al Alto del Castillo, que decidirá qué corredor se viste con el primer maillot morado de líder.

Ganadores en El Castillo

Los corredores que se han coronado en el Alto del Castillo en las ocho ocasiones que ha sido final de etapa en Burgos han sido Joaquin ‘Purito’ Rodríguez – Katusha (2011), su entonces compañero de equipo Daniel Moreno – Katusha (2012), el italiano Simoni Ponzi – Astana (2013), Juan José Lobato – Movistar (2014), Mikel Landa – Sky (2017), Francesco Gavazzi – Androni Giocatolli (2018), Giacomo Nizzolo – Dimension Data (2019) y Felix Grobschartner – Bora, el año pasado.

En las ediciones de 2015 y 2016 la Vuelta a Burgos a disputado etapa en la capital pero en formato de Contrarreloj por Equipos (CRE) y ambas se saldaron con victorias del Astana.